Continuamos nuestro especial de dos partes sobre la necesidad excesiva de aprobación, en el anterior artículo explicabamos esta actitud tan dañina en nuestra vida y en este propondremos 16 recursos fundamentales para eliminarla y llegar a ser una persona más segura, proactiva y feliz. Como siempre recordaros que son pautas que necesitan trabajo y constancia y que si llegan a convertirse en hábitos podremos cambiar y llegar a crecer como personas. Que lo disfruteis (y aprendais) mucho.
(Teneís más sobre el tema en esta colaboración que hemos hecho con el periódico El País)
Nuestro miedo o nuestra ansiedad no la crean los demás criticándonos (“No vales nada”), desaprobándonos (“Lo que acabas de decir es una tontería”) o atacándonos (“Pareces un estúpido cuando vistes así”). Las emociones las creamos nosotros según como lo interpretemos. Ser muy consciente de esta realidad nos da mucho poder en la vida y previene las necesidades excesivas de aprobación.
A no ser que seas Robinson Crusoe y vivas en una isla desierta, estarás rodeado de otras personas en tu vida y experimentarás desaprobación y rechazo con bastante regularidad. Puede ser que alguna vez hayas hecho algo realmente negativo o lesivo pero la mayoría de las veces la desaprobación y el rechazo poco tendrán que ver contigo personalmente. Si analizas (con objetividad y sin distorsiones) las ultimas veces que recibiste desaprobación o fuiste rechazado, probablemente llegues a la conclusión de que la cosa poco tuvo que ver contigo. La próxima vez que sientas emociones relacionadas con el rechazo (miedo, ansiedad o frustración), párate un momento, respira y analiza si esa persona que te está rechazando, está reaccionando contra algo que hiciste o no tiene nada que ver contigo. Cuando alguien reacciona negativamente hacia ti , normalmente es debido a que esa persona se siente insegura, cansada, estresada, está pensando irracionalmente, hubo un problema de comunicación o está lanzándote emociones negativas que nada tienen que ver con lo que hiciste.
Quienes buscan la aprobación no lo ven, pero la crítica puede llegar a ser un maravilloso regalo para nosotros. Es cierto que a veces nos llega y cuando abrimos el envoltorio nos damos cuenta de que dentro no hay nada (porque como decíamos antes puede que la otra persona no tenga ni idea de cómo somos, sea insegura o nos traslade sus miedos). Pero alguna vez la abrimos y podemos aprender y mejorar cosas, entonces aquí la crítica se convierte en un gran regalo. Tener la capacidad de enfocar así la crítica nos da poder, nos vuelve proactivos y rompe en pedazos nuestras dependencias de lo que digan los demás.(Más sobre como filtrar las críticas aquí)
Toma siempre tus propias decisiones: Cada vez que tengas que tomar una decisión no vendría nada mal hacerte preguntas como las siguientes, peguntas que sin duda te harán más consciente de tomar tus propias decisiones:
– ¿En base a qué estoy tomando esta decisión?
– ¿Qué es lo que necesito?
– ¿Y lo que quiero?
– ¿Cuales son mis metas?
– ¿Tengo algún miedo o inseguridad que me esté distorsionando?
– ¿Me influye demasiado la opinión y deseos de los demás?
– ¿Hay personas en concreto de las que me influye demasiado su opinión y distorsiona mis decisiones?…
Una de las mayores causas de la necesidad de aprobación es una autoestima baja ( y a la inversa, la necesidad de aprobación disminuye la autoestima). Trabajarla nos ayudará sin duda a romper con esta actitud. Cuando pensemos que somos personas valiosas, útiles, con una visión positiva, estable y personal sobre nosotros mismos, no nos hará tanto daño una desaprobación, porque lo veremos como algo natural que sucede en la vida y nos daremos cuenta que lo esencial es creer en uno mismo a pesar de lo que pase en el exterior.
Aprende a decir NO de manera sana, a quejarte, a poner límites, a pedir, a que te respeten tus derechos…cuanto más ganes en habilidades asertivas, más fácil te será desprenderte de esta actitud tan negativa e incluso “reeducarás” tus relaciones.
Cuando seas rechazado o criticado, ten siempre presente que las emociones que sientas (recuerda SIEMPRE el punto uno, tus emociones las creas tú) son transitorias. Vergüenza, ira, frustración, culpabilidad, miedo…emociones que sólo pueden mantenerse si las “trabajas” y las estimulas constantemente como si de avivar un fuego que se apaga se tratase. Esto se hace normalmente rememorando una y otra vez recuerdos, escenas o momentos que nos molestaron. Vale, es cierto que a veces no sienta bien que nos rechacen o critiquen pero encima estar todo el rato forzando este tipo de emociones no es nada efectivo para nuestra vida.
La meditación nos ayuda a observar todas esas emociones que hablamos en el punto anterior, aceptándolas y dejándolas ir. Además nos entrena a vivir nuestro presente y con ello ayudamos a nuestro cerebro a que no se enganche dándole vueltas a necesidades de aceptación pasados o futuros.
No podemos gustar a todos: Seas quien seas, tengas las virtudes que tengas, NUNCA gustarás a todo el mundo. Ya puedes ser la persona más simpática, interesante y atractiva del mundo que siempre habrá personas que te criticarán y desaprobarán. Debes saber que esto es algo eso le pasará a todo ser humano de este planeta, por lo tanto, necesitar la aprobación de los demás es algo bastante irracional, inefectivo y nos volverá personas constantemente reactivas en la vida.
Normalmente quienes necesitan aprobación suelen sobregeneralizar y piensan que si alguien les rechaza quiere entonces decir por lo tanto que ellos son unos inútiles o no valen como personas. Por ejemplo, el hecho de que te critiquen porque te hayas equivocado al hacer algo no significa que seas una persona torpe o poco inteligente, significa simplemente que has cometido un (posible) error.
Casi siempre que alguien nos desapruebe no significa un rechazo a nuestra persona. El problema radica en cuando una crítica a una conducta se toma como una crítica hacia nuestra persona, cuando en realidad, y pasa a menudo, sea un rechazo concreto hacia un gusto, conducta, forma de vida, opinión, etc… Por ejemplo alguien podría desaprobar a otro por un gusto cinéfilo o por una idea política. Eso no significa que tengamos que pensar que nos están rechazando como persona, sino que sea más una cuestión de incompatibilidad en gustos (pero ojo, si la otras persona te está rechazando como persona o sus formas no son las mejores, recuerda que siempre que siempre te queda la asertividad)
Las personas con necesidad de aprobación, creen más en las opiniones exteriores que en las suyas propias. Pero la realidad es que nadie nos conoce tan bien como nosotros mismo, por eso a menudo sucede que los demás, al no tener toda la información, se forman opiniones equivocadas de nosotros. Dejemos de darle tanto poder a lo que otros piensen de nosotros..demos ese poder a quien maneja toda la información, nosotros mismos.
Esto ocurre cuando uno intenta vivir de acuerdo con un modelo de “persona perfecta” que siempre debería ser generosa, ética, divertida, madura o triunfadora ( eso depende de cada estilo de personalidad). Cuando es así, cualquier rechazo o critica (que te toque tu punto débil) es vista como un fracaso.
Paradójicamente las personas que no piensan en la aprobación suelen ser más aceptadas que las que lo buscan. La explicación estaría en que suele gustar más lo auténtico (aunque no coincida con nuestras opiniones) que lo sumiso y entregado. Por lo tanto sé tú mismo sin buscar esa aprobación, sé auténtico sin preocuparte por la opinión exterior, ya que intentando gustar obtendrás el efecto contrario.
Un clásico en este tipo de actitud erróneas es adelantarse a la desaprobación sin ningún tipo de base. Si tenemos miedo a que nos acepten, obviamente estaremos anticipándonos constantemente a situaciones en donde aparezca este peligro y “seguramente no nos aprueben”.Pueden ser conversaciones, escenarios, conflictos o discusiones futuras.
No ganas nada imaginando vividamente escenas negativas que seguramente nunca ocurrirán. Corta ese pensamiento y céntrate cada vez mas en ti en tu presente.
Lo que oyes, los conflictos con otras personas (algo que temen muchísimo las personas con necesidad de aceptación) pueden ser muy buenos a reequlibrar la relación, mejorar la comunicación, poner límites o llegar a nuevas ideas.
Una de las maneras de evitar la búsqueda de aprobación es vivir una vida que es fiel a sus propios valores. Si sabes muy bien lo que quieres, a donde vas, tus fortalezas psicológicas o tus valores personales, afrontarás de manera poderosa cualquier desaprobación que tengas por el camino. Y si no que le pregunten a los grandes inventores, activistas, creativos, emprendedores o artistas de la historia de la humanidad que gracias a tener claro lo que querían fueron capaces de luchar contra viento y marea (la marea de la desaprobación) y conseguir lo que querían.
Categoría: Recursos psicológicos
Etiquetas: Actitudes negativas, Autoestima, Exito, Necesidad de aprobación, Proactividad, Recursos psicológicos, Reflexiones terapeuticas, Relaciones
Etiquetas de cine: Especiales
Esta semana acabamos nuestro especial sobre la culpa (el otro día definimos la culpa como una emoción inútil) y hablaremos de los recursos y herramientas que nos pueden ayudar a «desinstalar» esta emoción […]
Está claro, vivimos en la sociedad de la “Superfelicidad”, un mundo en donde las emociones sólo pueden (y están obligadas) a ser positivas. Felicidad, alegría, buenas sensaciones, buenos recuerdos, más alegría, felicidad 24 […]
Compra aquí
2 comentarios