La fortaleza psicológica de la mente abierta (Prayers for Bobby)

Esta semana dedicamos nuestro post a una excelente propuesta de uno de nuestros lectores, Oscar Blanco quien nos envía una muy buena critica sobre Prayers for Bobby, un magnífico telefilm americano basado en hechos reales y con una Sigourney Weaver estelar en su papel de madre católica enfrentada a un conflicto moral.

«Prayers for Bobby es una desconocida y humilde producción que salió directamente para TV en el año 2009. El filme cuenta la historia de un joven, Bobby, que vive en una familia de intensas creencias católicas, especialmente la madre, Sigourney Weaver, quien se enfrenta abrúptamente a la homosexualidad recién anunciada de su hijo así cómo la reacción de todos los miembros de la familia.

Si bien la reacción de padre y hermanos apenas es considerada, es Sigourney Weaver quien impone su presencia sobre todo el metraje de la película dejando bien claro qué personaje lleva las riendas de todo el drama. La historia está basada en hechos reales, y sorprende la energía con la que la madre lleva a cabo sus decisiones. Se destaca especialmente la idea de producir intenso dolor mediante el amor que sentimos por seres queridos y cómo, con esa misma energía, enfocada de modos distintos, se pueden lograr resultados sorprendentes, alcanzar límites personales inimaginables e incluso, atravesar puntos de no retorno. Personalmente, me resultan inquietantes las escenas en como unos meros «post-its» llevan al traste con la estabilidad y el equilibrio personal propios del protagonista. Prayers for Bobby, o cuando dioses y monstruos comparten hogar, aseo, desayuno… Digna de ver por el mero hecho de provocar la reflexión en el espectador.»

Por Oscar Blanco

Al hilo de esta magnifica crítica sobre Prayers for Bobby, nos gustaría reflexionar esta semana sobre la mente abierta o pensamiento crítico, una gran fortaleza psicológica que nos permite enfrentarnos a situaciones novedosas de manera efectiva, vivir con plenitud y aprender continuamente de lo que nos rodea. Una fortaleza que Sigourney Weaver aprenderá y desarrollará a lo largo de la película través de una serie de duras crisis personales, cambiando su enfoque vital y derrumbando su antiguo esquema de vida, rígido y dogmático. Una extraordinaria transformación que será apoyado sin duda en una apertura de mente y un pensamiento más critico sobre ella y sobre su vida.

Definamos en primer lugar esta fortaleza psicológica. La mente abierta consiste en afrontar una nueva situación de manera flexible, evaluar por igual todos los puntos de vista (sobre todo aquellos puntos de vista distintos al nuestro) y reconocer nuestros propios limites al analizar la situación (distorsiones ideológicas, autoengaños, sesgos naturales o conocimiento limitado de la situación). Esta fortaleza nos permite probar y enfrentarnos a nuevas experiencias, aprender de nuestros errores y puntos débiles, y trabajar de manera productiva con aquellos diferentes a nosotros. La mente abierta nos vuelve mas eficientes en nuestras decisiones (está comprobado que aquellas personas de mente abierta toman mejores decisiones porque evitan conclusiones precipitadas y están dispuestos a cambiar sus mentes una vez asumida la evidencia) y nos permite crecer como personas.

A lo largo de la película Sigourney Weaver debe enfrentarse al hecho de tener un hijo gay desde una posición religiosa extrema en donde su dogmatismo e inflexibilidad (dos buenos antónimos de una mente abierta) le impiden analizar de manera eficiente la situación. Nuestra personaje aprenderá a reconocer sus limitaciones ideológicas y a evaluar todos los puntos por igual incluidos aquellos diferentes a su posición religiosa. Una nueva mentalidad que le llevará a una postura más lúcida y efectiva ante la homosexualidad.

Tras observar como Sigourney Weaver aprende y se apoya en la mente abierta para afrontar una nueva vida comprendemos porque esta madre que tanto amaba a su hijo no era capaz de admitir lo que ocurría, arruinando de esta manera su relación. Dos piezas básicas en una buena interacción, la paciencia y la tolerancia, estaban bloqueadas desde el comienzo. La paciencia se compone de fortalezas como la persistencia, el autocontrol y la mente abierta, mientras que la tolerancia se compone de mente abierta y justicia. ¿Como se podía construir una relación equilibrada si ya desde el principio faltaba una pieza fundamental? Sigourney Weaver era cariñosa, luchadora, generosa, valiente, pero no analizaba de manera eficaz su relación con su hijo porque se distorsionaba desde una posicion ideológica extrema. Y esta ceguera iba a perjudicar sobremanera su relación. A lo largo de la pelicla Sigourney Weaver ganará en sabiduría y abrirá sus ojos y su mente ,porque las relaciones necesitan de la sabiduría necesaria para reflexionar, reconocer y trabajar en aquellos puntos débiles que la ahogan, sabiduría para abrir nuestras miras, sabiduría para aceptar aquello que no se puede cambiar

En el transcurso de la vida, los seres humanos siempre nos vamos a encontrar con nuevas experiencias y situaciones conflictivas y tan solo podremos hacerles frente descubriendo deficiencias en nuestros planteamientos, analizando nuevos puntos de vista y trabajando de manera productiva con aquellos que puedan pensar de manera diferente. Por eso la mente abierta es esencial para vivir una vida plena y por eso también la psicología positiva propone la mente abierta como fortaleza psicológica, porque nos permite vivir nuestra vida de la manera más efectiva y plena, creciendo constantemente como personas y dentro de un equilibrio emocional, ocurra lo que nos ocurra y seamos quien seamos.

(Para acabar os dejamos con el dircurso final de Sigourney Weaver en Prayers for Bobby)

Categoría: Fortalezas psicológicas

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